
La indignación y el repudio generados por el brutal ataque contra un perro en el municipio de Candelaria, Valle, tuvieron un importante avance este lunes con la captura de Walter Murillo, el sujeto señalado de dispararle repetidamente en la cabeza a su propia mascota.
La detención se produjo al interior de un conjunto residencial ubicado en el sector de Poblado Campestre, gracias a la oportuna denuncia y alerta de los residentes, quienes no dudaron en manifestar su profunda preocupación y rechazo ante el violento acto de maltrato animal.
La gravedad del hecho y la consecuente alteración del orden público en la zona hicieron necesaria la intervención de las autoridades para garantizar la integridad tanto del capturado como de su núcleo familiar.
Actualmente, Walter Murillo se encuentra en proceso de judicialización por su presunta responsabilidad en el delito de maltrato animal, tipificado en la Ley 1774 de 2016. Esta legislación busca proteger la vida e integridad de los animales, estableciendo sanciones para quienes cometan actos de crueldad contra ellos.
Mientras tanto, la comunidad y organizaciones de protección animal se mantienen en vilo por la salud de Max, el perro víctima de este cruel ataque. El canino continúa hospitalizado debido a la gravedad de las heridas sufridas. A través de redes sociales y diversos canales, se ha intensificado el llamado a la justicia para Max, exigiendo una sanción ejemplar para el responsable de este acto de barbarie.
Este caso ha reabierto el debate sobre la necesidad de endurecer las penas por maltrato animal y de garantizar una mayor protección para los seres sintientes. La comunidad espera que el proceso judicial avance con celeridad y que se siente un precedente importante en la lucha contra el maltrato animal en Colombia.