La Superintendencia de Salud encontró 113.000 unidades de insulina almacenadas en las bodegas de Audifarma, pese a que este medicamento ha sido negado a pacientes en diversos dispensarios del país. Ante este hallazgo, el presidente Gustavo Petro ordenó una investigación y posibles acciones penales, calificando el caso como un acto criminal dentro del sistema de salud.
“No existe justificación alguna, ni de tipo administrativo, ni por ninguna otra razón, para que estos medicamentos no estén disponibles para su entrega, y sí estén registrados como pendientes en las órdenes de los pacientes”, afirmó el superintendente Giovanny Rubiano.
La auditoría reveló que ocho de los 22 medicamentos más demandados por los usuarios tienen existencias en la bodega de Audifarma, pero no han sido distribuidos.
El presidente Petro, desde su cuenta de X, denunció un presunto acaparamiento de medicamentos para presionar contra la reforma a la salud en el Congreso y sostuvo que esta práctica es similar a estrategias empresariales usadas en golpes de Estado. Por su parte, la Supersalud ordenó a Audifarma que en un plazo máximo de 24 horas traslade los medicamentos a sus puntos de dispensación.