En una de las escenas más adorables que ha circulado en redes sociales, un pasajero de TransMilenio decidió cederle su silla a un perrito que viajaba junto a su cuidador y su inseparable oso de peluche.
Ante la falta de asientos disponibles en el bus articulado, el dueño del perro eligió que su mascota estuviera cómoda y segura, evitando el riesgo de que fuera pisoteada por los demás pasajeros.
El tierno momento fue captado por otros pasajeros, quienes no pudieron resistirse a fotografiar la peculiar escena: el perrito, de tamaño mediano, sentado tranquilamente en una de las sillas, con su peluche en la boca, mientras su dueño se acomodaba en el suelo frente a él.
Las imágenes rápidamente se hicieron virales, generando una ola de comentarios positivos y enternecidos en redes sociales, donde los usuarios destacaron la amabilidad del cuidador y el gesto de los demás pasajeros que, lejos de incomodarse, disfrutaron del inesperado y adorable compañero de viaje.
La escena, que fue descrita por muchos como “lo más lindo que verás hoy”, se ha convertido en un ejemplo de empatía y amor por los animales en la agitada rutina del transporte público.