La Misión Internacional Independiente de la ONU presentó un informe acusando al Gobierno de Nicolás Maduro de cometer “crímenes de lesa humanidad” antes, durante y después de las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela.
El informe detalla violaciones de derechos humanos, como asesinatos, desapariciones forzadas, tortura y violencia sexual, perpetrados por fuerzas de seguridad y grupos armados progubernamentales.
Según el documento, fuerzas como el SEBIN, la DGCIM, la Guardia Nacional y la Policía Nacional participaron en detenciones arbitrarias y represión violenta de protestas. Además, se señala la falta de transparencia e independencia de instituciones como el Consejo Nacional Electoral y el sistema judicial.
El informe también destaca que, durante el proceso electoral, la represión no solo afectó a líderes opositores, sino también a ciudadanos comunes que expresaron su desacuerdo con el Gobierno. Después de los resultados electorales, se llevó a cabo una ola de detenciones masivas sin precedentes, comparables solo con las protestas de años anteriores.