El domingo 22 de septiembre de 2024, tropas israelíes allanaron la oficina de la cadena Al Jazeera en Ramallah, Cisjordania, y emitieron una orden de cierre por 45 días, según informó la propia televisión catarí.
Durante la transmisión en vivo, se pudo observar a soldados fuertemente armados y encapuchados ingresando a las instalaciones, sin dar mayores explicaciones sobre la decisión.
En diálogo con el periodista Walid al-Omari, un soldado israelí mencionó que había “una decisión judicial de cerrar Al Jazeera por 45 días” y pidió que retiraran las cámaras y abandonaran la oficina de inmediato. Al Jazeera afirmó que no se les ofreció ninguna justificación adicional sobre la medida.
Este incidente es parte de una serie de acciones recientes del gobierno israelí contra la cadena, que incluyen la revocación de las credenciales de sus periodistas en el país y la prohibición de operar dentro de Israel, decretada hace cuatro meses. A pesar de estas restricciones, las emisiones de Al Jazeera en Cisjordania y la Franja de Gaza no se han visto interrumpidas.
Las tensiones entre Israel y Al Jazeera han sido constantes. El Ejército israelí ha acusado a la cadena de tener vínculos con Hamás y la yihad islámica en Gaza, alegaciones que la red niega categóricamente, asegurando que su personal ha sido atacado sistemáticamente durante la cobertura de los conflictos en la región.