
El 24 de marzo, en el barrio Nueva Gloria de la localidad de San Cristóbal, al sur de Bogotá, una menor de aproximadamente 13 años vivió un angustiante episodio cuando fue perseguida por un hombre en plena calle. El hecho quedó registrado por las cámaras de seguridad de un establecimiento comercial, mostrando cómo la niña, visiblemente alterada, ingresó a la tienda en busca de ayuda, desesperada por escapar del sujeto que la seguía.
A las 7:35 p.m., la menor entró al local y rápidamente pidió ayuda a la tendera, solicitando un producto mientras miraba nerviosa hacia la calle, como si tratara de ocultarse. Poco después, el acosador, un hombre con gorra gris y camisa azul, apareció en la puerta del comercio, observando fijamente a la niña, lo que aumentó aún más su miedo.
La menor, con evidente angustia, continuó interactuando con la tendera, pero no pudo ocultar su temor, mirando repetidamente al hombre que la seguía sin disimular. En ese momento, la niña empezó a hacer gestos y a murmurar a la tendera, pidiendo ayuda. Afortunadamente, la tendera no dudó en enfrentar al hombre, preguntándole qué deseaba. Ante la intervención de la mujer, el acosador decidió retirarse del lugar sin ofrecer ninguna explicación.
Tras la salida del sospechoso, la niña rompió en llanto y relató lo sucedido. La tendera, mostrando empatía y preocupación por el bienestar de la menor, la dejó quedarse en el local hasta que se sintiera segura, y luego la acompañó hasta su casa. En el trayecto, la mujer expresó su preocupación, señalando que ya había advertido a los padres sobre los riesgos de permitir que la niña saliera sola.
Aunque no se ha emitido un pronunciamiento oficial por parte de los padres de la menor ni de las autoridades, se ha iniciado una investigación para identificar al sospechoso, y las cámaras de seguridad de establecimientos cercanos están siendo revisadas para encontrar pistas.
El video del suceso se ha viralizado rápidamente en redes sociales, donde los usuarios han destacado la valentía de la niña al buscar ayuda y la solidaridad de la tendera. Sin embargo, la situación también ha generado preocupación por la vulnerabilidad de los menores ante el acoso en las calles. Varios comentarios en las redes sociales expresaron indignación por la presencia de este tipo de individuos en la vía pública y la urgencia de que se tomen medidas para garantizar la seguridad de las niñas, niños y adolescentes.