Una tragedia ha conmovido profundamente a la comunidad de Soacha tras la muerte de una bebé de solo dos meses, ocurrida en extrañas circunstancias el 11 de diciembre de 2024. La menor ingresó sin signos vitales al Hospital Mario Gaitán Yanguas alrededor de las 12:50 p.m., con hematomas en el cuello y signos que sugieren un posible abuso físico y sexual.
Según los primeros informes, la madre de la bebé la bañó y luego la expuso al sol. Posteriormente, el padre la recostó en la cama para limpiarla, y fue en ese momento cuando notó que su respiración era irregular. Preocupado, consultó con una enfermera en el sector de Tejares, quien le recomendó llevarla de inmediato al hospital, donde la niña llegó sin vida.
El diagnóstico preliminar señaló la presencia de hematomas en el cuello, lo que indicaría un posible abuso físico y sexual. Las autoridades están a la espera de los resultados de la necropsia médico-legal que confirmarán las causas exactas de su fallecimiento.
El caso ha generado una ola de indignación en Soacha, y el alcalde Julián Sánchez Perico Jr. ha exigido una investigación urgente y sanciones severas. “Pido celeridad absoluta y una actuación contundente para garantizar justicia. No es posible que el actuar de los adultos siga terminando en actos de violencia contra nuestros niños, niñas y adolescentes”, expresó el mandatario local en su cuenta en la red social ‘X’.
Las autoridades han tomado medidas inmediatas: el hermanastro de la bebé, de 14 años, ha sido puesto bajo la custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), mientras que los padres de la niña han sido detenidos y se encuentran a disposición de la justicia.
La policía y la Fiscalía continúan con la investigación para esclarecer las circunstancias que llevaron a la muerte de la bebé y determinar la responsabilidad de los involucrados. Este lamentable suceso subraya la urgente necesidad de reforzar las medidas de protección infantil y actuar con rapidez frente a cualquier indicio de abuso en Colombia.